De los ochenta equipos que compiten en Segunda División B, solo dos han conseguido arrancar la temporada con cuatro victorias. Y uno de ellos, con el salmantino Carlos Cristeto en sus filas, está a punto de igualar el mejor inicio de un cuadro recién ascendido a la categoría según datos de la cuenta de twitter Vintage Stats. Es la Peña Deportiva, situado a una victoria de firmar un arranque que únicamente consiguieron llegados desde una categoría inferior otros dos conjuntos: el Lemona en la temporada 1987-88 y el Girona diez años antes.

“Estamos muy contentos. No nos esperábamos un inicio así, pero el equipo es la base del año pasado. Nos conocemos, y la verdad que somos un gran equipo. Vamos todos a una”, asegura Carlos Cristeto sobre el espectacular regreso de los ibicencos en una categoría en la que el club únicamente ha estado anteriormente tres temporadas, y nunca logró la salvación. “Estamos trabajando mucho y desde el principio la pretemporada ha sido dura para intentar estar ahí arriba. El objetivo es la permanencia, pero hay que seguir en esta línea”, añade el jugador salmantino.

Si a nivel colectivo Cristeto no podía firmar un inicio mejor, en el apartado individual tampoco parece fácil. Ha participado en todos los encuentros, y en los tres primeros fue titular. “El año pasado ya hice una gran temporada. Hice 11 goles y jugué casi todos los partidos de titular”. Unos números que demuestran que tiene la confianza del entrenador, Raúl Casañ, con el que ya consiguió el ascenso el curso pasado.

Formado en las categorías inferiores de la Unión Deportiva Salamanca, con el club charro debutó en Segunda B cuando todavía era juvenil. “Era mucho más joven. Ya tengo 25 años y considero que he madurado. La categoría es dura, física, pero me he acostumbrado mucho más a ella”, indica Carlos Cristeto.

Y aunque el inicio ha sido bueno, el futbolista salmantino no quiere que esto pare. “Hay que seguir a este nivel y a ver qué pasa con el futuro, ya que acabo contrato este año”, explica Cristeto. Y aunque actualmente se encuentra a gusto en el conjunto ibicenco, no cierra las puertas a un posible regreso: “Nunca hay que decir que no volveré a casa. Sigo mucho el fútbol salmantino, al Salamanca, y quiero que esté lo mejor posible. A pesar de todas las dificultades que han pasado quiero que esté ahí arriba”, finaliza el actual jugador de la Peña Deportiva, que sin olvidarse del cuadro blanquinegro manda además “fuerza a Pablo Cortés, un tío de la casa”.