Primer partido del año para Perfumerías Avenida y primera victoria de un equipo que, sin tiempo para el descanso, ha hecho los deberes antes de que los Reyes Magos lleguen, esperemos, cargados no solo de victorias, sino de títulos y Plazas Mayores llenas de salmantinos aplaudiendo a las suyas.

Con lluvia no solo de peluches, sino también de mucho baloncesto especialmente en la segunda parte, cuando Perfumerías Avenida comenzó a anotar todo lo que pasaba por sus manos y a repartir juego, haciendo gala de su crecimiento como equipo, llegó la primera victoria de 2020 al pabellón de Würzburg.

En el primer cuarto, la primeras tres campanadas fueron un tanto frías. El equipo necesitaba volver a sentir el ritmo competitivo en casa y con bajos porcentajes de tiro, especialmente desde la línea de 6,75, las perfumeras fueron poco a poco, de menos a más, sacando de partido al equipo visitante.

En el quinteto inicial apareció Fagbenle, a quien le faltó tiempo para demostrar de lo que era capaz. Como un auténtico muro en la zona, parecía tener imanes en las manos para atraer todos los rebotes y no hubo nadie que pasara por la zona sin que se llevara un pequeño susto de la pívot inglesa.

Además, encontró en Hof una gran aliada y entre ambas dieron los primeros puntos al equipo salmantino. Eso sí, todas las que salían anotaban y Avenida consiguió mantenerse por delante todo el primer parcial. Final del primer cuarto: 17-11.

En el segundo cuarto, las siguientes tres campanadas y una marcha más en el partido. La falta de efectivos en el equipo visitante se hacía notar y Perfumerías Avenida tenía que desgastar a las de Tenerife para volver a ganar con solvencia a un equipo que, recién ascendido, ha conseguido la clasificación para la próxima Copa de la Reina.

Primera jugada y robo de Laura Gil, segunda y de nuevo robo para canasta de Samuelson. Las charras tenían ganas de fiesta y todas las profesionales que habían salido ya habían anotado en menos de quince minutos. Sin embargo, la verdadera fiesta llegó tras el descanso.

Un nuevo partido comenzó con la segunda tanda de las campanadas, si antes parecía que la pelota no quería entrar, en el tercer cuarto balón que tocaba una jugadora de azul, balón que entraba en el aro. Con cuatro tiples, más que en toda la primera parte, 8 puntos únicamente de Loyd y una Fagbenle que parecía haber jugado con el equipo salmantino toda la vida, Avenida consiguió un parcial de 27-5 que le sirvió para llegar al último cuarto con 34 puntos de ventaja: 64-30.

El parcial era de 13 a 0 y continuó en el cuarto periodo ante la impotencia del equipo tinerfeño, que poco podía hacer ante el poderío físico de un Perfumerías Avenida que ya ha comenzado su puesta a punto para estar al 100% en la Copa de la Reina.

El colofón final llegó de la mano de Inés Santibáñez, que pese a la presión que de por sí otorga la pista de Würzburg, además de las alrededor de 2.500 personas presentes, consiguió sacar una falta para sumar un punto a su casillero personal.

Conclusión final positiva, pese a las circunstancias con las que venía el rival, y además confianza para jugadoras como Maite Cazorla y la novata Fagbenle, que pese a no haber entrenado demasiado con el equipo y estar todavía perdida tanto en ataque como en defensa, dio muestras de sus facultades.