La primera vuelta del Ribert ha tenido dos partes bien diferenciadas. Una, con Miguel de la Fuente en el banquillo donde el equipo no acababa de carburar; y otra, con Miguel Losada al timón de una nave que despegó y que se mantiene como firme candidato a todo.

El conjunto salmantino se encuentra en cuarta posición con 28 puntos y en la última jornada tuvo la posibilidad de encaramarse al liderato, pero el Peñaranda se lo impidió con su victoria en el derbi.

«Cuando llegamos al equipo nos encontramos un grupo comprometido que quería cambiar las cosas y nuestro objetivo era poco a poco intentar meternos en la pelea de los que estaban arriba para posicionarnos bien y en la segunda vuelta estar ahí y optar al ascenso. Y en ese aspecto estamos muy contentos porque el equipo ha ido a más«, asegura su entrenador, Miguel Losada.

Cuando el técnico aterrizó en su banquillo, el Ribert marchaba en undécima posición y desde entonces ha sumado seis victorias y tres derrotas, precisamente en tres derbis ante el Hergar, el Béjar Industrial y el Peñaranda.

La dinamita del equipo en la parte ofensiva está siendo una de las claves de esta remontada, y es el que conjunto blanco es el máximo goleador del grupo con 36 tantos.

«Estamos bien posicionados, no hay mucha distancia y queda una vuelta muy larga, 17 partidos que van a ser duros porque lo que sí hemos visto es que es una competición muy igualada, todos los equipos te pueden complicar las cosas y con los arrastres todos los equipos se van a jugar cosas y no va a ser fácil para nadie. Si mantenemos una regularidad estamos convencidos de que podemos optar al ascenso, es nuestra ilusión y lo que vamos a pretender durante esta segunda vuelta», sentencia Losada.