Necesita mejorar su juego para la final Perfumerías Avenida, pero lo importante es que el equipo salmantino estará peleando por el título de la Copa de la Reina. Para ello tuvo que superar en la primera semifinal a Araski, que se despide del torneo con un excelente papel, al poner en aprietos al campeón de las tres últimas ediciones (45-60).

La intensidad defensiva con la que empezó el partido el conjunto vitoriano sorprendió a las anfitrionas, que al menos cortaron el camino de su aro a base de tapones. Además, la única pieza a la que no conseguía frenar Araski, que era Silvia Domínguez, atacaba con éxito (3-7).

La capitana y guía del conjunto perfumero hacía trabajar a María Asurmendi, sin relevo claro por la lesión en cuartos de final de Izaskun Ruiz. Precisamente la base logró igualar la contienda, y aunque su rival respondió al contragolpe, otra ex jugadora azulona, Laura Quevedo, apretaba el marcador desde la línea de tres (12-13).

Al final del primero periodo, la oscuridad volvió a apoderarse del ataque de Perfumerías Avenida, que encadenó más de tres minutos sin anotar. No lo desaprovechó el cuadro vasco, que se impuso en el parcial inicial, castigando las siete pérdidas de su rival (14-13).

Los problemas en ataque del equipo dirigido por Miguel Ángel Ortega continuaron, aunque desaparecieron de manera temporal tras una falta antideportiva de Natalie Van den Adel que espabiló a las anfitrionas (15-23). No se vino abajo Araski, que de nuevo volvió a acercarse con un triple, esta vez de Raquel Carrera (23-26).

Las salmantinas eran conscientes de que necesitaban subir un punto más la intensidad, y comenzaron a hacerlo desde la defensa, provocando que su adversario agotara tres posesiones en otros tantos minutos. En ese tiempo Araski solo logró anotar un tiro libre, mientras que en la zona contraria Tiffany Hayes encontraba huecos para penetrar hacia el aro (24-32).

Pero como en ocasiones anteriores, cuando las vitorianas caminaban sobre el alambre, volvían a resurgir con fuerzas y lideradas por Raquel Carrera devolvían el empate al marcador (36-36). Quedaban dos minutos y medio para acabar el periodo, y aunque la defensa perfumera volvió a obligar a su rival a posesiones largas, Avenida continuó con problemas para ver aro (37-41).

El conjunto charro tardaba en poner a punto el choque, pero al menos consiguió arrancar los fogones para cocinarlo. En solo dos minutos Araski cometió cuatro faltas de equipo y tardó otros dos en conseguir sus primeros puntos del cuarto. Además, Tiffany Hayes castigaba desde el triple, donde el porcentaje de acierto de su equipo era tan solo del 10% en la media hora previa (37-49).

La estadounidense, que fue fichada para estos momentos, apareció cuando Avenida más la necesitaba, y si había comenzado el periodo con diez puntos, acabó el choque con 21 en su casillero. Una actuación que fue demasiado para su rival, que aun así cayó con honores en una semifinal con muy buen ambiente (45-60).