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Nueva etapa en Saldeporte

‘Lo que da de sí una tirada larga’

Juan Carlos Hernández y Ana, su pareja, en un banco del parque de la plaza Asdrúbal, en Cádiz
Juan Carlos Hernández | 15 abril, 2020

El lunes pasado Roberto Fernández, de Bicirun, me avisó por si quería escribir algo especial ya que iba a dejar de publicar la revista y lo único que hice fue añadir un párrafo al artículo que ya tenía preparado porque no me gustan las despedidas y mi idea era darle las gracias en el siguiente artículo, como hago ahora de todo corazón.

Para mí se cierra una etapa de la que me quedará la amistad con Roberto, a pesar de que en todo este tiempo nuestra relación ha sido por teléfono y no hemos llegado a quedar en persona. 

Hace unos meses le comenté que veía que en la revista solo se publicaban mis artículos y que si tenía que tomar alguna determinación no se preocupara por mí. Empecé en Facebook y continuaría publicando allí porque me gusta escribir y es la manera de aclarar lo que se me pasa por la cabeza cuando hago deporte en solitario, corriendo o nadando, de ahí ‘Lo que da de sí una tirada larga’. Me dijo que se estaba dando un tiempo para decidir si podía continuar con el proyecto y ya entonces me hice a la idea de que en cualquier momento podía llegar el final.

Cuando me puse en contacto con él, hace ya más de dos años, le pareció bien la idea de publicar mis escritos y hasta me enseñó a usar WhatsApp por ordenador para que me fuera más fácil enviar los artículos y las fotos.

Me dijo que lo único que haría sería repasar los artículos antes de publicarlos por si había alguna falta de ortografía o sintaxis, lo debió de hacer con los primeros, pero después confió tanto en mí, o eso quiero creer, que se publicaban tal cual se los enviaba. Cuando en alguna ocasión, contadas, le dije que si podía cambiar algo porque no me gustaba como quedaba o se había colado una errata, al rato estaba hecho. Trabajar con él ha sido muy fácil.

Recuerdo perfectamente la primera vez que me puse en contacto con Roberto. Estábamos Ana y yo sentados en un banco del parque de la plaza Asdrúbal, uno de mis sitios favoritos de Cádiz por la vida que tiene ese pequeño espacio verde y porque allí también está el Bare Nostrum o el ‘ambigú’ como coloquialmente le llamamos nosotros, al que comenzamos a ir por mi suegro y al que no podemos faltar cuando vamos. Un bar de los de allí, pequeño porque con el buen tiempo la gente normalmente está en la terraza, aunque los hay que se amontonan dentro y solo se van porque cierra, que si no se quedarían a vivir allí, lo mal que lo tienen que estar pasando en la cuarentena sin poder ir. La terraza es amplia, en el mismo parque y a partir de la una del mediodía es difícil encontrar una mesa libre, pero da igual porque la gente se queda de pie consumiendo. 

Además, al lado hay un kiosko, el Tangai (alboroto), ideal para un desavío como dicen allí (algo que necesitas de repente), pues lo mismo te vende el pan que un bocadillo, unos chicharrones (parecido al cuchifrito de aquí), papas fritas o una cerveza para que te la tomes fuera con los clientes del bar.

El sitio es perfecto, poco tráfico, el parque para que los niños jueguen y los padres estén a lo suyo. Y en cuanto a la clientela, os puedo asegurar que es difícil encontrarla tan variopinta y fiel como aquella y que de hecho es otro de los alicientes que tiene, el ambiente.

Allí tendríamos que haber estado esta Semana Santa, pero los planes de todos han cambiado de un mes a esta parte y yo no me puedo quejar mucho porque peor ha sido para otros. Desde aquí mando un abrazo enorme a los que han perdido a un ser querido, entre los que tengo algunos conocidos.

Y volviendo al presente. Lo que es la casualidad, el martes Nieves Chamorro compartió un artículo de Saldeporte sobre Rafa Iglesias, entrenador y alma mater de su equipo Run and Go, de su trabajo en la policía local de Salamanca y la situación creada por el Covid-19. Así que me animé a escribirles y me respondieron que encantados de poder contar conmigo, que conocían mi trabajo y que en su momento también habían colaborado con Roberto, con quien tienen además buena relación. No volví a ponerme en contacto con ellos hasta que se lo comenté a Roberto porque me parecía que era lo que debía hacer, le ha parecido bien y dice que me deja en buenas manos con Adrián y Ricardo. Así que aquí empieza una nueva etapa en Saldeporte.

Os prometí que hoy escribiría de deporte. Sigo con el ejercicio físico, haciendo carrera de hasta hora y media en movimiento por la terraza y la casa, porque al aumentar el tiempo se me cargaban los gemelos con el sistema de la goma y resulta que, aunque hay que tener cuidado con tanta vuelta para no marearte, ahora sí que sudo de verdad, en lo que influye que cada quince minutos de carrera hago ejercicios para subir la intensidad.

En la bici he vuelto a conectar, después de años, el rodillo al simulador y me meto rutas con algún puerto para sudar bien. Además, un par de días a la semana grabo en audio las clases que después envío al grupo de gimnasia, sesiones de hora y media que tanto a ellos como a mí nos vienen muy bien. 

He tenido que subir el volumen y la intensidad porque veía que esto dura y la forma física se nos va de las manos con tan poco movimiento y tanto viaje al frigorífico.

Buena semana amig@s.

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Una respuesta a “Nueva etapa en Saldeporte”

  1. Ángel dice:

    Uno ya se había acostumbrado a leer cada martes tus crónicas deportivas narradas con ese estilo ágil y directo que las hace tan entretenidas a la vez que informan de los eventos deportivos del atletismo y ciclismo albense. Suerte en esta nueva etapa, Juan Carlos.

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