El calendario avanza y en Alba de Tormes tienen una fecha marcada en rojo en este mes que hoy comienza. Es el 18 de julio, el día en el que su equipo de fútbol sala, el Piensos Durán Albense, disputará por primera vez en su historia una fase de ascenso a Segunda División.

Enfrente estará el Leis Pontevedra y si logra solventar la eliminatoria de manera favorable, espera después el Atlético Benavente. En el seno del club ven la fecha con ilusión y, aunque lejana todavía, desean que los días pasen rápido para afrontar el reto.

Su capitán, Miguel Ángel Durán, es uno de los que vive con más ganas si cabe la fase de ascenso. El guardameta lleva desde los 6 años en el Piensos Durán Albense y ahora, 19 años después, tiene la oportunidad de guiar al equipo de su vida a una categoría más alta. «Es muy especial, nunca se había jugado algo así y estoy superilusionado«, reconoce.

El meta albense hace extensible esa ilusión a todo el vestuario y asegura que esta fase de preparación se está empezando a hacer larga. «Hemos empezado a entrenar en el pabellón y bastante mejor en lo nuestro, pero los tiempos son los tiempos. Ahora estamos repasando estrategia, bastante balón estamos metiendo y ya mejor. Esto es como una pretemporada que tienes que preparar para un partido, dos o tres como mucho», señala.

Al final de todo este periodo aparece el Leis Pontevedra, rival al que el Piensos Durán Albense ya se impuso en la fase regular. «Solo pudimos jugar allí, pero fue un partido muy duro, ellos estuvieron todo el segundo tiempo con portero-jugador, todo el rato metidos en nuestra pista. Es un equipo muy duro, nos lo pusieron muy difícil allí, tienen muy buena estrategia y jugadores», concluye.