El Piensos Durán Albense ha caído este martes ante el Universidad de Valladolid en el partido aplazado de la tercera jornada. El conjunto salmantino lo intentó, pero se estrelló contra la muralla pucelana liderada por el guardameta Rubén.

El dominio del balón fue prácticamente total por parte de los de Óscar González, proponiendo y tratando de atacar, pero los visitantes se mostraron como un equipo muy sólido con una defensa bien plantada en campo propio.

Una desafortunada jugada local, con un choque entre Moassin y Miguel, propició que Víctor hiciera el 0-1 a puerta vacía. Era el minuto 7 y fue el primer acercamiento con un mínimo de peligro sobre la meta albense. Pero como se suele decir, las desgracias nunca vienen solas y en un córner a favor de los verdiblancos llegó el 0-2 en una contra rematada por Isaac, ex del Piensos Durán Albense.

Si los salmantinos no habían tenido ocasiones claras hasta entonces, desde el 0-2 hasta el descanso fue un goteo continuo de oportunidades con peligro. Y cuando las grietas aparecieron en la muralla vallisoletana, el meta Rubén se erigió en el salvador de su equipo. Lo paró todo.

La segunda mitad fue un calco de la primera. El Universidad de Valladolid esperaba rezagado y el Piensos Durán Albense chocaba una y otra vez contra su entramado defensivo. La quinta falta visitante en el minuto 9 dio alas a los de Óscar González, más incisivos en los manos a mano a partir de entonces, pero apenas cuatro minutos después llegó la quinta falta local.

De hecho, fueron los pucelanos los que tuvieron el primer doble penalti, bien repelido por Miguel. A renglón seguido le llegó el turno de probar suerte a Morales, que en el minuto 14 por fin logró batir a Rubén con un disparo potente a la izquierda del meta.

Se abría entonces el camino para una posible remontada, pero si algo había dejado claro el Universidad de Valladolid era que a las contras era muy peligroso. Y así sentenció el partido por medicación de Javi tras asistencia de Víctor a falta de cinco minutos.

Óscar González apostó por el portero-jugador, pero Rubén se había puesto el disfraz de pulpo y no hubo manera de batirlo. Morales tuvo otra oportunidad desde el doble penalti, pero el larguero repelió su disparo y el encuentro llegó a su fin con el 1 a 3.