Victoria del Ribert en el derbi provincial sobre el Béjar Industrial por tres goles a cero, en un encuentro en el que los de Jehu fueron muy superiores a los textiles, que, salvando los primeros diez minutos, estuvieron muy incómodos en Las Pistas. Los blancos con este resultado alcanzan los catorce puntos en la clasificación, empatando en lo más alto con el Ciudad Rodrigo.

Entraron al partido más entonados los visitantes, que tuvieron una ocasión en el minuto siete en las botas de Íñigo dentro del área, pero Chuchi se echó encima y pudo parar el balón con seguridad. Tras ese buen tramo inicial del Béjar, comenzaron los blancos a llevar el ritmo del duelo y las oportunidades.

Antes del cuarto de hora, un tiro de Palomi casi supone el primero para el Ribert. Disparó desde lejos, el cuero quedó en el área parado tras un rebote y Marcial llegó en segunda estancia, pero Kike consiguió anticiparse y desvió la pelota a línea de fondo. Los locales seguían mejor y pronto se adelantaron en el marcador. En un saque de banda cercano al córner, el cuero llegó al área pequeña y Marcial revolviéndose consiguió rematar a la red.

Subieron la intensidad los de Jehu tras el gol y cerca estuvieron de hacer el segundo con un tiro potente de Gustavo desde lejos, al que Kike con una buena estirada le negó el tanto. Minutos después tuvo otra muy clara el 11 de los locales, con un pase entre línea que pilló a la zaga textil adelantada. Gustavo se quedó solo contra Kike, le regateó, pero su pasividad hizo que llegase Tomás para impedir un gol cantado. Finalizó así una primera mitad en la que el Ribert fue superior, salvo en los primeros diez minutos.

La segunda parte comenzó con un gol anulado al Ribert en un remate de cabeza de André en un córner en el que el colegiado señaló falta en el salto. Los blancos bajaron el bloque, pero se sentían cómodos en defensa y creando peligro al contraataque.

El Béjar Industrial se sentía inseguro y en una salida de balón errónea llegó el segundo de Marcial. Recuperó el balón su equipo y con una buena triangulación le llegó la pelota al delantero, que regateó a Kike y marcó a placer.

El tanto supuso una losa para los pupilos de Ferreiro, que estaban siendo muy superados. Tanto fue así, que llegó el tercero del Ribert para ponerle el broche al derbi charro. Desde dentro del área Palomi tiró con mucha calidad al segundo palo para redondear un muy buen partido a nivel individual y colectivo.

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