Logotipo Saldeporte

Chuchi Jorqués: «Me da mucha pena ver que en los últimos 25 minutos hemos bajado los brazos»

El entrenador del Guijuelo ha destacado en la rueda de prensa después del partido ante el Oviedo B que a su equipo le ha faltado actitud en los minutos finales, pero que van a dejarse el alma en los siete partidos restantes

Chuchi Jorqués durante una rueda de prensa / Foto: CD Guijuelo
Pedro Alonso | 4 abril, 2021

Resultado:  hemos perdido merecidamente, no hay nada que objetar. Solo podemos felicitar al Oviedo y mañana a pensar en que quedan 21 puntos por disputar y tenemos que intentar ir a por ellos. Desde el primer minuto la sensación es que nos ha costado entrar en el partido, no hemos sido capaces de tener el balón, ganar segundas jugadas… El Oviedo nos ha ganado en intensidad, nos ha ganado esos duelos y el principal culpable y responsable de esto soy yo, no hay otra.

Goles: no he visto el primero, pero creo que remata muy solo y nosotros ahora mismo con lo que nos estamos jugando no lo podemos permitir. Esta semana he incidido en hacerles ver que la victoria del otro día nos tenía que valer para creer, dar esa continuidad y ser humildes porque toda la gente como que menosprecia a los del otro grupo y piensa que no son tan fuertes. Me quedo con la sensación de que esa victoria no nos ha servido para darle continuidad y me jode, porque hemos hecho buena semana de entrenamiento, hemos planteado cómo teníamos que estar y no hemos sido capaces de transferirlo. No nos hemos sentido cómodos en ningún momento del partido.

Sensaciones de los jugadores: he dicho reiteradamente que nos estamos jugando la vida. Se pueden reprochar muchas cosas, de verdad que pienso que el principal culpable de la derrota de hoy soy yo, porque a lo mejor no he transmitido lo que yo quería, esa intensidad, vivir el partido desde el minuto uno hasta el noventa y pico… a lo mejor no se lo he dicho de la manera acertada. Teníamos que haber afrontado este partido al doscientos por cien. Si no somos capaces de estar cómodos con balón, hay otro fútbol: golpeo, segunda jugada, ser ganadores, juntar en campo rival tras segundas jugadas… y tampoco hemos sido capaces. El 0-1 nos ha hecho mucho daño, excesivamente anímicamente ese gol. Hemos intentado cambiar en el descanso, meter a jugadores de refresco, jugadores de nivel, pero tampoco hemos sido capaces de tener continuidad y de pisar área.

Falta de actitud de los jugadores: no, sería injusto si digo eso. Yo creo que el culpable de todo esto soy yo, pero no creo que haya dejadez con lo que nos estamos jugando. Sí que creo que a partir del 0-1 y del 0-2 nos ha hecho mucho daño. Hay muchas maneras de perder, pero a mí me da muchísima pena como entrenador y como persona ver a mi equipo los últimos 25 minutos que no tenga esa garra o ese carácter de ir. Yo les puedo transmitir mucho de ir, pero luego hay que ir. A mí me da pena. El Oviedo ha sido mejor, pero tú puedes tener maneras de perder. Puedes terminar los últimos 25 minutos, a pesar de que te metan el 0-2, de apretar, de ir, de morder, de pisar área… pero no lo hemos hecho. No quiero ver a mi equipo con esa sensación, pero no quiero pensar que haya dejadez, porque no me lo han transmitido así durante la semana, ni quiero pensar que es así. Me niego a pensar eso.

Siete partidos por delante: es difícil, porque quedan 21 puntos por disputar y a lo mejor necesitas 18, pero no es imposible porque las matemáticas están ahí. Yo lo que quiero transmitir es que tenemos que ir a morir y transmitir que estamos yendo a morir cada minuto de los siete partidos que nos quedan. Lo tenemos difícil, pero no imposible. Yo creo en ello hasta que las matemáticas lo permitan. Ahora, si no lo conseguimos dentro de dos o tres jornadas, y quedar tres o cuatro por disputar, tenemos que ser lo suficientemente honrados y honestos con un club que te está pagando al día y todas las facilidades para que vivas bien y tenemos que morir por ese escudo. Aunque ya no te estés jugando ya nada, que nadie tenga suspicacia de que vamos a ir por ahí dejándonos llevar, y aunque pase lo que todos queremos que no pase, tenemos que ir como auténticos bestias en cada partido y que nadie pueda reprocharnos nada, y que cuando termine la temporada y salgamos por esa puerta, nos podamos mirar a los ojos. Tenemos que ser honestos, ser competitivos y terminar con la cabeza alta. Me niego a que mi equipo se deje llevar. No podemos dar la sensación de que nuestra gente nos vea que los últimos 25 minutos hemos bajado los brazos y no creemos. No me gusta poner ejemplos, pero me gustaría que todos hubieran hecho lo que ha hecho Kike: morir, creer, ha doblado, ha ido, ha centrado, morir… Que cuando termine el partido y te miren a los ojos te digan: lo he dado todo, pero ha habido un equipo que ha sido mejor, pero lo hemos dado todo. A mí me da mucha pena por ellos y me da mucha pena como entrenador de ver que los últimos 25 minutos hayamos bajado los brazos.

Compartir

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *