Semana tras el descenso. Ha sido difícil, será una de las semanas más difíciles de mi carrera deportiva, hasta como jugador. Un descenso, aunque pienses que en algún momento puedes pasar por la situación que pasábamos, es difícil asumirlo. Sinceramente, debemos ser honrados, profesionales y disciplinados para acabar la temporada lo mejor posible por respeto al club, al escudo, a la afición y a nosotros mismos. El lunes fue un día muy difícil, pero el martes descansamos y los demás entrenamientos, dentro de la situación que tenemos, estoy contento de cómo han trabajado los chavales y de su actitud. No es fácil y estoy consiguiendo lo que buscaba, que sean profesionales, honrados y tengan orgullo por venir a darlo todo, que es su trabajo y por lo que les pagan. Lo están haciendo y me siento orgulloso por ellos, porque me pongo en su pellejo como futbolistas y no tiene que ser fácil.

No bajar los brazos. Sus entrenamientos durante la semana han sido buenos. Es verdad que llegado el domingo tenemos que tener personalidad para asumir las consecuencias de lo que ha pasado, que es el descenso. Nos quedan 270 minutos por correr, por competir y por defender el escudo, en los que dentro de ese egoísmo que tiene el jugador individualmente tienen que ponerlo al servicio del grupo. Hay que intentar luchar por el bien de cada uno y por el bien del club en estas tres semanas. No sé lo que va a pasar en cada partido, pero tenemos que tener la suficiente personalidad, porque no tenemos nada que perder, para dar la cara en cada partido. Yo como jugador me dejaría el alma, que nadie me pueda reprochar nada. Ya no estamos hablando de acierto con o sin balón, porque el fútbol es un deporte de acierto y error, pero la actitud no nos puede faltar en ninguno de los minutos de los partidos que nos quedan. Les he transmitido que no es lo mismo terminar la temporada con 21 o con 28 puntos. Tenemos que ir a por los tres partidos, porque creo que los chavales y el club se lo merecen, y nos dejamos de especulaciones de si nos hemos dejado llevar. Con actitud, con ganas y con personalidad evitas comentarios.

Futuro de los jugadores. El egoísmo tiene que ser de querer hacerlo ellos muy bien, para demostrar que son buenos futbolistas de cara a la próxima temporada el que se quiera quedar aquí o el que se quiera ir a un equipo mejor. Pero ese egoísmo debe ser para el beneficio del equipo. No me vale que el domingo coja un jugador y quiera regatear a cinco, porque me está jodiendo a mí y perjudicando al equipo. Pero si ese egoísmo es poner ganas y actitud, meter la pierna y competir, saldrá beneficiado el equipo y el club. Daremos una buena imagen y será bueno para todos.

Rumores que rodean al club. Respecto a las especulaciones, les he transmitido que ahora mismo nos tenemos que aislar de todo eso, es lo mejor. Nos tenemos que centrar y poner el foco en entrenar bien estas tres semanas, proponer yo ejercicios divertidos, que compitan y se diviertan compitiendo, que lo que hagamos táctico sea ameno para llevarlo al partido. Todo lo demás, que sale fuera, no lo podemos controlar, y por eso no es inteligente desgastarnos en ello. Ahora mismo lo que menos me preocupa, sinceramente, es mi futuro. Me preocupa terminar bien estas tres semanas, que es lo más honrado por el club. Cuando me transmitan si es que sí, estaré feliz, y si me dicen que no, estaré agradecido por la oportunidad y me iré a casa con mi mujer y mis hijos, a buscar otra oportunidad. Lo mejor de todo es que yo tengo la conciencia tranquila y quien filtra esos rumores sabrá por qué es. Yo no lo sé, pero duermo fenomenal todos los días. Me levanto con la misma ilusión que hace quince días por venir a dar todo por el Guijuelo, porque que nadie se olvide que es uno de mis equipos, lo llevo en el corazón y todo lo que he vivido aquí como jugador no se me ha olvidado. Ahora estoy en deuda como entrenador por lo que ha pasado deportivamente, todo lo demás no lo puedo controlar y no me voy a desgastar ni un minuto.

¿Qué ha faltado en el equipo? Creo que a base de tiempo, cuando acabe la temporada, podré hacer un balance. Tendré que hacerlo desde el 8 de febrero con el cuerpo técnico y si quiere la directiva, para ver qué he hecho bien y qué he hecho mal, qué puedo mejorar y qué no haría. Sí tengo claro es que si me llaman el 8 de febrero para venir a Guijuelo cien veces, diría que sí 101 veces. En el proceso seguramente me habré equivocado y puedo mejorar cosas, pero hay que hacer el balance cuando termine. Cuando sale una temporada tan irregular y tan complicada como esta hay muchos factores que pueden haber influido. Tiene que terminar la temporada y analizarlo para que no vuelva. Yo puedo analizar desde el 8 de febrero, lo que ha pasado antes lo desconozco, no sé qué ha pasado ni soy quién para juzgar a los hermanos Montes, a Astu, a Natalia y a la directiva. Me estaría metiendo donde no me llaman y bastante tengo para barrer mi casa, como para barrer la de los demás. No soy quién para opinar, salvo desde el 8 de febrero. Hay que hacer un balance por el bien del club, y por el bien mío y de mis jugadores. Cuando pasa esto todos hemos fallado en algo, será cosas deportivas y extradeportivas. Nunca vengo a una rueda de prensa a quejarme, pero hay muchas cosas que han pasado fuera que te pueden perjudicar en el día a día, como lesiones y sanciones. No he querido mandar ese mensaje negativo ni escudarme, he querido luchar con lo que tenía cada semana, porque creo que es lo más honrado. Me gustaría haber tenido como en las últimas semanas a los veinte bien y que el capitán hubiera estado bien, para hacer convocatorias y demás, pero como no ha podido ser y no lo puedo controlar, tengo que luchar con lo que tengo. Para qué me voy a desgastar en lo que no tengo…pero ha habido un cúmulo de circunstancias que te pueden perjudicar, como el formato. En otro momento quedarían en esta situación 10 o 12 partidos por jugar. La dinámica que tiene ahora el equipo, con esos partidos por delante, tendríamos muchas opciones de salvarnos, pero con este formato no nos ha dado tiempo. Estoy jodido porque cuando llegué conseguí 1 punto de 21, me jode y me hierve la sangre, pero no puedo hacer nada. Si hubieran quedado más partidos, habríamos tenido más opciones de salvarnos. El equipo ahora sabe lo que tiene que hacer y compite, el otro día con el Oviedo hicimos un buen partido, el segundo gol ya ni lo cuento porque estábamos con 3-4-3. Es muy fácil ahora comentar, decir y tirar paladas de mierda, pero desde el sofá. Sé que a veces me equivocado como entrenador, pero lo he sabido cuando se terminó el partido. Cuando he sacado cada once titular es porque he pensado que era lo mejor en cada momento, y cada cambio y cada sistema. Es muy fácil criticar, tengo que aceptar que en mi faceta como entrenador habrá gente que me valore y gente que no. Hay gente que seguirá diciendo que no tengo experiencia y el club se ha equivocado, y otra que me escribe cada semana que me dice que el equipo es otro y da gusto verle. Esa disparidad de opiniones está ahí y no lo puedo controlar, acepto las buenas y acepto las malas, pero me gustaría que los que dicen ambas me vieran trabajar para hacer una valoración.

Covadonga. Creo que ellos no van a cambiar mucho su tesitura, en los últimos partidos han jugado cuatro o cinco juveniles y el entrenador ha dicho que van a seguir contando. Es un equipo que está descendido, igual que nosotros, pero que intentará ser un equipo honrado y disciplinado. Intentará darlo todo, como ha hecho el otro día contra el Pontevedra. Es lo que les transmito a los jugadores, que seamos capaces de ir a ganar los tres partidos en vez de estar jodidos tres semanas más. Mi objetivo es que haya rotaciones, que entre gente que no ha sido titular y se lo merecía, porque estaba entrenando muy bien y yo había encontrado un once tipo que estaba funcionando. Habrá rotaciones, pero desde el minuto 1 hasta el 94 iremos a ganar el partido, para que cuando acabe nos sintamos orgullosos de haberlo dado todo por el equipo y por el escudo. Nuestro objetivo es ir a ganar, ir a por los nueve puntos. Puede haber momentos en los que sea duro, pero no tenemos nada que perder. Nadie nos puede reprochar que no vamos a por el partido y no tenemos actitud, eso sí que me jodería en el alma y se lo he transmitido a ellos.

Comentarios tras el descenso. Solo he descendido una vez como jugador, en el Deportivo Palencia, y fue duro. Los partidos que quedaron me dejé el alma, como muchos, todos los minutos. La gente te lo sabe reconocer y cuando salimos, a pesar del descenso, nos dieron las gracias por el esfuerzo. La situación en la que estamos es esa, de lo que ha pasado el domingo hay que asumir los comentarios porque hemos descendido al equipo. Es lo que toca, poner el paraguas y aguantar, pero no podemos descuidarnos estos tres partidos. Se han perdido quince años de historia en el club y eso es jodido. Para mí sería difícil descender en cualquier equipo, pero en uno en el que considero mi casa es bastante más complicado. Sabía a lo que venía y que podía pasar, pero si me vuelven a llamar vendría hasta corriendo para asumir el reto.