Nunca había visto tan cerca Unionistas de Salamanca la opción de ascender a la Liga del Fútbol Profesional, que está actualmente a solo tres pasos. Eso sí, fallar en un partido le impediría jugar los siguientes en un empujón final que arranca frente al Valladolid B, al que visita en los Anexos de Zorrilla para cerrar la segunda fase a las 12 horas del domingo.

Será el compromiso más fácil de los que le quedan al conjunto blanquinegro, ya que le vale con empatar para garantizarse el tercer puesto. También lo lograría con una derrota, siempre que no sea por más de dos goles de diferencia o no vaya acompañada del triunfo del Zamora ante la Cultural Leonesa.

Aún así, si gana puede acabar segundo y facilitar sus cruces en el play-off, aunque necesita a su vez que el Celta de Vigo B no sume tres puntos frente al Burgos CF. Las eliminatorias se sortearán el lunes y se celebrarán en Extremadura.

Los pupilos de Hernán Pérez han alcanzado esta situación privilegiada gracias a una racha de tres victorias consecutivas que comenzó precisamente en su anterior duelo con el Valladolid B. Hasta entonces habían comenzado el subgrupo con dos tropiezos que dejaron a los blanquinegros sin prácticamente margen de error, pero han caminado por el alambre con mucha seguridad.

Todo lo contrario ha ocurrido con el filial pucelano, que lleva tres jornadas sin puntuar después de haber empezado la segunda fase con dos triunfos. Una de las claves de su caída está siendo su fragilidad defensiva, con diez goles encajados en esas derrotas y sin dejar tampoco la portería a cero en los partidos que ganó. De hecho, es el equipo con más tantos recibidos de todo el subgrupo.

En cuanto a enfrentamientos previos, Unionistas únicamente ha visitado los Anexos de Zorrilla en una ocasión, que acabó con el gol del guardameta Molina en los compases finales para lograr el empate. De hecho, ese fue el mismo resultado de sus enfrentamientos restantes con la excepción del último, que cayó del lado charro.

Hernán Pérez no podrá contar con Mandi Sosa, sancionado por acumulación de tarjetas. Además, ya ha recuperado a Benjamín Garay, que tendrá difícil jugar en el centro de la defensa, resguardado por la pareja que forman Mario Gómez y Ramiro. El primero de ellos dio el susto en uno de los entrenamientos de la semana y el segundo regresa tras sanción. Por su parte, Javier Baraja tiene la ausencia de Oriol, sancionado, y la duda del tocado Nieto.