Comenzaba la jornada con un pequeño colchón, pero el filial del Salamanca UDS aumentó su ventaja con respecto a los puestos de descenso, a los que deja ahora a cinco puntos. Para ello tuvo que sufrir contra el Real Burgos, que llegaba desahuciado a Las Pistas y con solo doce jugadores en la expedición.

Los pupilos de Javier Guillén empezaron con ganas y en los diez primeros minutos lo intentaron con dos faltas directas. No consiguieron enviar el balón entre los tres palos ni Lauren Egea ni Motos, mientras que con el balón en juego Willy disparó por encima del larguero instantes más tarde.

En torno al ecuador del primer tiempo el conjunto visitante estrenó su cuenta de ocasiones, con un remate muy lejano de Taborda que se marchó altísimo. Sin embargo, casi a renglón seguido estuvo a punto de encajar gol en una jugada que se inventó Antonio Alemán con un sensacional pase entre líneas; Clay Silvas ganó línea de fondo, pero Nico López tiró al muñeco desde el área pequeña.

Posteriormente el ritmo del encuentro se redujo enormemente y una semivolea de Pedro Dango que se marchó desviada fue la última acción reseñable antes del descanso, cuando todavía quedaba un cuarto de hora para alcanzarlo. Aún así, en una jugada aislada tras el paso por vestuarios, Denilson estrenó el marcador con un cabezazo llegando desde segunda línea.

En el último cuarto de hora el Real Burgos comenzó a generar dudas en su rival. De hecho, un despeje de Martín Cascajo casi se cuela en su portería después de estrellarse en un rival e instantes más tarde Miguel Moreno llegó muy forzado a un buen pase por encima de la zaga de Álex Reyes. El delantero visitante no tardó en disponer de otra oportunidad en la que logró redimirse, porque en el saque de esquina posterior un jugador blanquinegro cometió el penalti que dio lugar al empate.

El filial del Salamanca UDS era consciente de que se le estaban escapando dos puntos muy importantes para su lucha por la salvación, los cuales sumó con el tiempo reglamentario cumplido. Denilson centró al área una falta lateral y el testarazo picado de Guareño acabó en el fondo de las mallas. Ese gol tan decisivo fue muy protestado por el conjunto rival, tanto que acabaron expulsados Taborda y el delegado por ese motivo.