Después de haber participado en cuatro de las últimas cinco ediciones de los play-off de ascenso a Segunda División, la perseverancia de Kike López ha tenido premio. Al fin y al cabo, en el listado de equipos que participarán la próxima temporada en la categoría de plata del fútbol español aparece el Ibiza, que puso la guinda a una espectacular temporada con una victoria por la mínima ante el UCAM Murcia.

«Sin lugar a dudas es el momento más feliz de mi carrera y eso que tengo recuerdos muy bonitos, como cuando debuté en Primera siendo tan joven. Lo del domingo es algo indescriptible, no tengo palabras», asegura el propio jugador, que cumplía su segundo curso en el club balear.

Además, el futbolista salmantino de 33 años tuvo una actuación clave en la eliminatoria definitiva, ya que forzó el discutido penalti que decidió el encuentro. «Fue una jugada muy rápida en la que me derriban. En el momento no sé si es dentro o fuera, lo que sí sé seguro es que me arrolla. A partir de ahí, en alguna imagen se ve perfectamente que la pierna derecha está dentro del área. Hay que felicitar al linier, porque normalmente no suelen entrar en las decisiones del árbitro principal y eso le va a dar muchos puntos en su carrera», explica sobre dicha acción.

El delantero Ekain no falló la pena máxima y el Ibiza aguantó el resultado durante los últimos veinte minutos para certificar el ascenso. «Creo que nos lo hemos merecido, porque en todas las fases hemos quedado campeones y eso al final tiene su recompensa», considera Kike López. No en vano, su equipo solo ha sufrido cuatro derrotas y diez goles encajados, unos números que había que confirmar en el partido definitivo, porque un día antes el CD Badajoz se había quedado sin subir pese a haber perdido menos encuentros todavía.

En el caso del jugador salmantino, el curso acaba con 1.881 minutos entre Copa del Rey, liga y play-off. Aún así, no le gusta valorar sus actuaciones. «Las dejo para otras personas. Lo que sí puedo decir es que siempre intento hacer todo lo que está en mi mano para que mi equipo gane y cuando al final de cada partido se consigue la victoria yo soy el tío más feliz del mundo«, declara.

Con este ascenso Kike López podría regresar a una categoría que conoce bien, puesto que a lo largo de su carrera ha jugado 127 partidos en Segunda División. Aún así, para ello deberá negociar con su actual club. «De momento no tengo contrato más allá del 30 de junio. Ojalá el Ibiza me renueve, nada me haría más feliz. He peleado mucho por volver a poder jugar en Segunda División. Si no es así, intentaré ver qué opciones tengo y siempre elegiré en función del reto deportivo que pueda tener por delante. En unos días me imagino que se despejarán las dudas», finaliza.