¿Cómo te sientes una vez conseguida la salvación, objetivo marcado por el filial del Salamanca UDS al principio de temporada?

A nivel personal me siento un poco liberado y con la sensación de poder descansar y poder jugar estas dos últimas jornadas sin esa presión que hemos tenido desde principio de liga, tanto en la primera fase como en la segunda. A nivel profesional, como dices, era el objetivo que nos marcábamos al principio de temporada, con lo cual en ese aspecto tengo la sensación de que al menos la categoría la mantenemos.

Si le tuvieras que poner una nota al rendimiento del equipo, ¿cuál sería?

Bueno, a nivel general podría ir variando. La primera vuelta de la primera fase creo que nos costó mucho adaptarnos a la categoría, tanto al cuerpo técnico como a los jugadores. Tuvimos cinco partidos seguidos en los que no puntuamos, que es donde se nos fue la opción de habernos mantenido en la zona intermedia o incluso haber mirado un poco más arriba. En esa primera fase necesitamos mejorar, aunque no creo que los partidos fueran malos, porque sí había un control y transmitíamos la idea que queríamos. Eran partidos que se nos escapaban por la mínima, había errores que nos penalizaban mucho y a nosotros nos costaba mucho hacer ocasiones y materializarlas. A medida que avanzaba la temporada lo fuimos corrigiendo y hemos mejorado todos. Luego a partir de navidad sí que hay un cambio, subiría esa nota y acabaría en alto en esta segunda fase, que no era fácil. Creo que hemos demostrado lo que es capaz de dar el equipo y sobre todo en situaciones límite, que hemos tenido muchas a lo largo de la temporada.

Aunque os han sobrado dos jornadas, ¿fue una decepción haber tenido que esperar a la segunda fase para sellar la permanencia?

Pues mira, al principio sí, porque nos quedaban dos partidos de la primera fase. Empatamos con el Atlético Bembibre por un gol de penalti en contra al final, pero nos veíamos con opciones de sacar ese partido adelante y el siguiente en casa, que era contra el Santa Marta. Ahí creo que fue un cambio de mentalidad. Desde el cuerpo técnico le intentamos transmitir a los jugadores una mentalidad de corregir todos los errores que habíamos cometido a lo largo de la temporada. También para ellos era una oportunidad de seguir compitiendo, porque sabíamos que el primer equipo no podía ascender y nosotros hubiéramos acabado la liga en abril prácticamente. Se les transmitió esa idea de seguir compitiendo, estaba ese objetivo ahí y no se podía escapar en la segunda fase.

¿Qué crees que ha podido faltar para haber estado más arriba?

Yo creo que al principio nos faltó madurez y experiencia en la categoría, y hablo de todos, no solo de jugadores. Luego sí que éramos dominadores del juego en cuanto a intentar tener el balón y progresar con él, pero nos faltaba rematarlas. Si no recuerdo mal ha habido doce empates a lo largo de la temporada, y quizás con un poco de acierto o algún gol más en esos partidos, en la clasificación de la primera fase habríamos quedado más arrriba.

Como tú mismo comentas, esta ha sido tu primera experiencia como técnico principal en el fútbol sénior. ¿Cómo te has visto y qué crees que tienes que mejorar?

Igual que podemos decir que la mayoría de jugadores eran sub-23, con una media prácticamente de 21 años y muchos llegados de División de Honor, a mí me pasaba un poco lo mismo. No había tenido esa experiencia como primer entrenador y lo valoro de manera muy positiva, tanto a nivel personal como de trabajo, por todo el esfuerzo que hemos realizado. Y más cuando lo tienes que compatibilizar con las clases por las mañanas, entrenar por la tarde, los viajes…a veces no es sencillo. Por un lado, para mejorar, tengo que intentar dedicarle más tiempo del que he podido dedicar. He intentado dar siempre el cien por cien, pero hay ocasiones en las que no llegas a todo. A todos nos ha servido como aprendizaje y experiencia, habrá varios errores que a toro pasado no cometería, ahora cuando terminemos la temporada tendremos que reflexionar todos. Pero me quedo sobre todo con lo positivo, que nos ayudará a seguir creciendo, y lo negativo aprender de ello y seguir para adelante.

Hace unos días se conoció la marcha de Mike a un equipo mexicano. ¿Habrá más salidas una vez conseguido el objetivo o seguirán los mismos jugadores entrenando y compitiendo hasta que acabe la liga?

Con respecto a Mike, salió la oportunidad y habló personalmente con el club y el cuerpo técnico. Es otra de las labores que tenemos como filial y como cuerpo técnico, a los jugadores jóvenes poderles dar ese paso intermedio a seguir mejorando. Nosotros le dijimos que estábamos encantados de que le hubiera salido esa oportunidad y por eso marchó. Ahora, en lo que queda hasta final de temporada, es posible que algún jugador también alguno pueda irse unos días antes. Sobre todo los que han estado en dinámica de primer equipo, que no han tenido esas vacaciones que merecían ni en navidad ni ahora. Pero está claro que nosotros vamos a seguir compitiendo y trabajando hasta el final, y a salir a los dos partidos que nos quedan a intentar quedar en la primera posición.

Por otro lado el juvenil ha quedado eliminado antes de lo esperado, así que os permite tirar también de esa plantilla y foguear a jugadores que quizás el próximo año estarán en el filial, ¿no?

Sí, así es. También es otro punto a tener en cuenta de toda la temporada, valorar el trabajo que ha hecho el juvenil. Igual que nosotros subíamos a jugadores al primer equipo, ellos han estado siempre dispuestos a subir con nosotros, tanto a entrenamientos como a partidos, e incluso algunos hicieron la pretemporada con nosotros. Ahora que ellos ya no van a seguir entrenando, sí que subirán varios jugadores del juvenil e incluso podrán entrar en convocatoria en las dos jornadas que nos quedan.

Esta temporada no han debutado tantos futbolistas del filial en Segunda B como en ocasiones anteriores. ¿Esperabas que subiera alguno más o con la situación del primer equipo era casi imposible?

De subir, la verdad que en el día a día sí que se ha contado con ellos. Han estado subiendo una media de cinco, seis o siete jugadores todas las semanas, prácticamente en dinámica del primer equipo. No es solo contar la convocatoria o el debut, sino todo el trabajo que se hace semana a semana. Nosotros hemos intentado aportar nuestro granito de arena, pero sí que es cierto que la situación no era tan óptima de que pudieran debutar más jugadores. Incluso como dijo Lolo Escobar, hasta el último partido no se jugó con esa tranquilidad que te daba mantenerte o tener el objetivo cumplido. Es normal que no debuten tantos jugadores, porque el primer equipo se lleva jugando finales desde enero.

Se rumorea que la próxima campaña varios de tus pupilos sí podrían dar el salto a la primera plantilla. ¿Les ves preparados para jugar en Segunda RFEF?

Yo creo que para ellos, a nivel personal y profesional, este año sí que ha sido positivo. Han podido evidenciar en la primera fase de liga situaciones que no son fáciles y a medida que avanzaba la liga les dejaba ese puntito de madurez que muchas veces se les pide a los jugadores sub-23. Les ha aportado, tanto a nivel futbolístico y deportivo, como a nivel personal. Creo que a los que el club valore para subir a la Segunda RFEF están preparados y creo que son jugadores a tener en cuenta, no solo el año que viene sino en un futuro.

¿A ti te han pedido una valoración con respecto a qué jugadores podrían subir?

Sí, pero no solo me han preguntado por un jugador u otro al final de la temporada, sino que la comunicación ha sido a lo largo de todo el año. Se han ido dando diversas opiniones, también de los que iban subiendo y valoraba el primer equipo. Ahora, al final, se hará una valoración más general de esos jugadores que puedan ser más válidos para el primer equipo.

¿Y qué ocurrirá contigo, continuarás en el club o todavía no sabes qué harás?

A día de hoy, como siempre, le agradezco al club la oportunidad de este año. Confiar en una persona como yo, que no tenía la experiencia de otros entrenadores en la categoría, es de valorar. Siempre estaré muy agradecido. Lo primero era cumplir el objetivo, ya se ha cumplido, y ahora hay que acabar los dos partidos que nos quedan. Ya veremos cuando finalice.

¿Pero te gustaría seguir?

Por el momento…voy mucho día a día, también por el tema de llevar doble trabajo y depender de dónde puedo trabajar el año que viene. Lo tomo mucho año a año y así va a seguir. El club es consciente del trabajo que se ha hecho, a veces los resultados no son los que nos gustarían, pero eso pasa en cualquier equipo. Nos hubiera gustado estar en esa zona media-alta, un objetivo mirando más hacia arriba, pero no fue así y nos ha tocado luchar hasta el final. Yo personalmente me quedo con cosas muy positivas y ahora pienso solamente en acabar los dos partidos que nos quedan, luego ya veremos.