Ha tardado cinco jornadas, pero al fin llegó la primera victoria del Santa Marta DH esta temporada. Y lo hizo a lo grande, después de dejar la portería a cero y sufrir enormemente ante un rival como el Getafe, llamado a pelear por los primeros puestos del subgrupo.

Cuando los dos equipos todavía estaban acomodándose sobre el campo los locales llevaron el balón al área rival, aunque ningún atacante consiguió rematar. Al menos forzaron un saque de esquina en el que probaron una jugada muy habitual en la que se peina el esférico en el primer palo, aunque despejó bien la zaga madrileña.

Comenzó entonces el dominio azulón, que vivió en campo contrario durante la siguiente media hora. Y aunque el Santa Marta no concedía ocasiones muy peligrosas, vivía constantemente con el miedo en el cuerpo, condicionado también por la situación clasificatoria en la que se encuentra. Durante esos minutos Gil, ex jugador tormesino, estuvo a punto de adelantar a los visitantes con un remate que se marchó rozando el larguero. A cambio respondió Jorge de Vicente, tras un saque de banda, con un disparo flojo que salió muy cerca de la madera.

La posesión de balón se equilibró en el último cuarto de hora, pero fue entonces cuando el Getafe aumentó la presión sobre Jorge Valentín. El guardameta atrapó junto a la cepa del poste un zurdazo de Mamor, que se había internado en el área a trompicones. Dos minutos más tarde el delantero de origen senegalés se volvió a topar con el portero, ya que estrelló un tiro a bocajarro contra su cuerpo.

En su última acción de la primera parte Jorge Valentín blocó un disparo a la media vuelta de Rojo, que se revolvió bien en el área. El empate hasta ese momento era bueno para el Santa Marta, aunque precisamente fueron los pupilos de David Recouvreur los que dispusieron de la última ocasión antes del descanso, con un zurdazo de Dani que se estrelló en la defensa.

El Getafe comenzó la segunda mitad con un nuevo aviso, en un pase atrás de Mamorque remató fuera un compañero. Pero se encontró con lo que no esperaba, un gol salmantino anotado por Jorge de Vicente. Un balón a la espalda a la defensa lo recogió el juvenil de primer año, que avanzó hasta el área y definió a la perfección ante la salida de Juampa.

Ese tanto relajó los locales, a los que les faltó muy poco para aumentar su ventaja en los siguientes minutos. En un despeje de puños del guardameta getafense el cuero le cayó a Bogajo, cuyo disparo se marchó rozando el larguero. Poco después, en un desplazamiento en largo la peinada de Chea permitió que Hugo entrara al área, aunque su remate se marchó desviado.

El conjunto madrileño seguía llegando con peligro de vez en cuando, pero los centrales del Santa Marta frenaban en seco cualquier opción de gol. En cuanto a la salida de balón visitante, el portero arriesgaba cada vez más, algo que en varias ocasiones le dio un buen susto.

Según se cumplían minutos, los pupilos de David Recouvreur sufrían cada vez más y daba la sensación de que el partido se les podía hacer largo. Pero también aumentaban los espacios que dejaba atrás el Getafe, lo que daba opciones al contragolpe para el conjunto local, como un tres para uno que no prosperó. Poco después, los madrileños volvían a dar muestras de peligro, con un disparo en el área que salvó Jesús.

El último empujón del cuadro azulón lo inauguró un remate de Mario Jiménez desde fuera del área a las manos de Jorge Valentín, mientras que antes incluso de cumplirse el tiempo reglamentario Chinchu, reconvertido en delantero, tuvo un mano a mano que finalizó con un tiro desviado.

El Santa Marta acabó con un 5-4-1 y recibió el empujón que necesitaba desde la grada, sobre todo en el añadido, que duró más de cinco minutos, un tiempo que se hizo eterno. Cumplido el tiempo reglamentario el Getafe tuvo dos opciones muy claras, aunque ambas quedaron invalidadas por falta sobre la defensa.