Después de su actuación del año pasado, todos los ojos van a estar puestos sobre él. Miguel Risco llega al triatlón #Veracruz como máximo favorito al triunfo final y lo sabe, aunque ello no le conlleva ningún tipo de carga añadida.

«Presión, ninguna. Correr en casa es para disfrutar. Para mí que vivo fuera cualquier opción de correr cerca de casa es fenomenal y mucho más en un triatlón como el que hace el Triatlón Salamanca, es un placer desde que salimos hasta que llegamos a meta», asegura.

Risco llega en buen estado de forma y tras una semana muy productiva de entrenamientos en Alicante. Al haber comenzado en el triatlón hace tres años, aún se encuentra en esa curva de crecimiento que le hace ser temido por sus rivales.

El salmantino afincado en Bonn, Alemania, solo tiene palabras de admiración para el circuito: «Para el triatleta y el espectador es maravilloso y poder disfrutar de la parte interior de la ciudad cuando la mayor parte de los triatlones son en carreteras llanas que se alejan de la ciudad… Recorrido por dentro es técnico y eso a los buenos ciclistas les puede beneficiar. Es una pasada nadar en el Tormes con la Catedral al lado, Veracruz, la carrera por el margen del río…».

Eso sí, la principal pega no va dirigida a la organización, sino más allá. Y es que cualquier ayuda para visibilizar el triatlón es poca. «Lo único que pudiera ser mejorable es que se les diera más facilidades a lo organizadores para que las pruebas pudieran de una forma más sencilla pasar por el centro de la ciudad y así hacer el deporte más visible«, reivindica.

Por último, sobre sus rivales apunta y elogia a Alberto Bravo, que en este mismo espacio se autodescartaba: «Alberto es uno de mis referentes y para cualquier trialeta lo sería por su calidad humana y deportiva y la manera de entender el deporte. Aunque tire balones fuera también es candidato por su trayectoria«.