La selección española de balonmano femenino se alzó el pasado domingo con la plata en el Campeonato del Mundo, el mayor éxito cosechado hasta el momento. Cierto es que la polémica decisión final se llevó mucho de los focos, pero con el paso de los días la plata se va saboreando cada vez más.

El Confiterías Gil Ciudad de Salamanca estuvo muy pendiente del avance de las ‘Guerreras’ durante todo el torneo. Aunque las horas a las que se disputaban los partidos les impedían reunirse para verlos, el grupo de WhatsApp echaba humo y en la final ante Holanda se comentaba prácticamente cada jugada, incluida esa decisión arbitral que privó a España de un premio mayor.

«Te llevas la desilusión en la final en la última jugada, es discutible y al acabar estás decepcionada, pero en cuanto pasan los minutos, las horas…eres subcampeona«, señala la capitana del conjunto charro, Ángela Madruga.

Y es que el objetivo principal de las ‘Guerreras’ en este Mundial era el de clasificarse para el preolímpico, ni mucho menos se podía soñar con las medallas. «Creo que además de la mejor clasificación, nadie se lo esperaba porque el objetivo era el preolímpico. De repente te encuentras con una selección que no tiene una estrella como puede tener Holanda con Polman o Abbingh, pero tienes una selección muy completa, que juega muy bien en equipo y que tiene una defensa que para mí ha sido la clave de haber llegado tan lejos. Es una generación bastante joven, pero tienes veteranas como Nerea y Silvia Navarro que te dan cierta seguridad que siempre está bien», explica.

Sin embargo, más allá del éxito deportivo, la directora de orquesta del Confiterías Gil quiere destacar el paso adelante que ha dado el deporte con esta actuación: «Es un paso muy importante, todos los títulos te dan repercusión y es importante, lógicamente, pero una cosa que me ha gustado mucho a lo largo del campeonato es que he tenido varios amigos que nunca se habían acercado a este deporte y al acabar la final me escriben para que les explique la jugada, porque el balonmano o lo sigues o la gente no sabe prácticamente nada. Mucha gente se ha acercado al balonmano y al balonmano femenino por cosas como estas. Espero que vaya de aquí para arriba, mucha prensa se ha interesado por el deporte y espero que a partir de ahora sea así y vaya todo para arriba».

Ariadna Siñol y Eli Cesáreo, compañeras durante cuatro años

A sus 20 años, Eli Cesáreo puede presumir de haber jugado un Campeonato del Mundo y haber conseguido una medalla de plata. La jugadora del Super Amara Bera Bera es el mejor ejemplo del cambio generacional que están viviendo las ‘Guerreras’.

Dentro de la plantilla del Confiterías Gil Ciudad de Salamanca encontramos a una ex compañera suya durante cuatro años tanto en el Sant Vicenç como en la selección catalana. Se trata de Ariadna Siñol.

«El progreso que yo pude ver fue el de una persona que iba ganando poco a poco confianza y que se esforzaba muchísimo en mejorar. Entregada 100% en el balonmano y con los pies en la tierra en el sentido de que a pesar de ser la mejor del equipo siempre era humilde con todas. Eli siempre se centró en mejorar y su objetivo siempre fue dedicarse a ello profesionalmente», señala la barcelonesa sobre su ex compañera.