La localidad de Cabrerizos celebró con gran éxito una nueva edición, y ya van cuatro, del Trail Escarpes del Tormes. La prueba, organizada por el equipo de deportistas amateurs Dcabrerizos, tuvo un carácter solidario al colaborar con la Fundación de Ayuda a los niños con Problemas de Corazón. Los participantes, que echaron a correr a las diez de la mañana desde la plaza de la Constitución, se dividieron en dos recorridos diferentes.

El trail tuvo un trazado de 23 kilómetros, desarrollándose en los cortados ubicados entre Cabrerizos y Aldealengua con un desnivel positivo superior a los mil metros. Discurrieron así por los parajes de los escarpes del Tormes que dan nombre a la prueba, una zona singular por su vegetación, su geomorfología milenaria, sus fósiles y las espléndidas vistas que no solo permiten ver la capital charra, sino gran parte de la provincia salmantina. Por su parte, los participantes en el cross recorrieron 14,5 kilómetros, con un desnivel acumulado de 420 metros.

La victoria en el trail cayó en manos de Iván Bernardo en categoría masculina, que entró en meta con una ventaja superior al medio minuto con respecto a Francisco Javier Gil, mientras que Manuel Vicente Tejedor entró más rezagado y completó el podio. En féminas la más rápida fue Juana Montaño, acompañada en el cajón por María Díez y Verónica Sánchez. Todos ellos recibieron, además del trofeo y diferentes obsequios, premios económicos de 100, 60 y 40 euros respectivamente.

En cuanto al cross, el ganador de la categoría masculina fue Miguel Ángel Martín García, seguido en meta por Carlos Grijota y Luis Manuel González. Y en féminas, María Eugenia González acabó en lo más alto del podio, al que también subieron Dori Ruano y Cristina González.

El recorrido tuvo varios puntos de avituallamiento y además todos los que completaron el recorrido recibieron una gran bolsa del corredor con numerosos obsequios, entre ellos una medalla conmemorativa. Además, tras la carrera la organización dispuso de duchas, guardarropa, servicio de guardería y además permitió disfrutar de una master class de zumba, llevada a cabo por Soledad Rivero.