Ya son cinco jornadas consecutivas las que acumula el Guijuelo sin sumar un solo punto. Ayer explicábamos uno de los motivos, la falta de gol, pero el conjunto chacinero también se está viendo lastrado por las tarjetas rojas. De hecho, en ese lapso de tiempo ha sufrido cinco expulsiones.

Este mismo problema ya lo tuvieron mediada la primera vuelta, aunque se prolongó durante menos tiempo y solo acabaron con diez jugadores contra Deportivo y Coruxo. Sin embargo, regresó precisamente contra los coruñeses. Desde entonces han sufrido una expulsión frente a Celta B y Zamora, y aunque se libraron en su segundo duelo contra el Coruxo, todo se ha recrudecido en la última jornada con dos rojas ante Unionistas de Salamanca.

Por todo ello el Guijuelo tiene el dudoso honor de marchar segundo en la clasificación de expulsiones de toda la categoría de bronce, superado únicamente por el Leioa (8). Además, en su subgrupo dobla a todos los demás equipos, perseguido de lejos por Racing de Ferrol y Zamora (3).

«Yo les he repetido a los jugadores que quiero que mi equipo sea intenso, pero eso no es pegar patadas ni codazos. Son cosas evitables y me jode que por ahí se te pueda marchar el partido después de una semana espectacular. Antes del partido les conciencio de que tenemos que terminar con once, pero cuanto más se lo digo peor es», aseguraba sobre este tema Chuchi Jorqués después del último derbi.

Los jugadores chacineros más castigados son Cristóbal y Kike Pina, reincidentes ambos. El caso del mediocentro es el más sangrante de todos, porque regresaba de sanción contra Unionistas y volvió a ver la cartulina roja. El listado lo completan Parra, Kamal y Razvan.