Ha sido la gran noticia salmantina del Campeonato de España de Pista Cubierta. Lorena Martín logró la medalla de bronce en el 800 y desde que terminó la carrera no ha dejado de recibir felicitaciones tanto en público como en privado.

Llegaba con la octava mejor marca de todas las participantes y en los días previos aseguraba que su intención era pasar a la final y una vez allí, rascar todo lo que pudiera, no se ponía ningún límite. Y así lo hizo, voló sobre la pista para alcanzar el podio y una nueva mejor marca personal de 2:07.13.

«La primera atleta (Natalia Romero) puso un ritmo frenético que yo no estaba preparada para asumir, así que decidí centrarme en mi carrera y esperar un poco atrás asegurando la tercera posición aunque acabé con fuerza y quizá podría haber alcanzado a la segunda (Lucía Pinacchio), pero ella planteó una carrera valiente y fue mejor que yo. La primera era inalcanzable», explica.

Este bronce supone una doble alegría: la medalla en sí y la confirmación de que Lorena ha vuelto por sus fueros después de que una lesión le lastrara prácticamente toda la temporada pasada.

«Valoro la medalla mucho, sabiendo que he tenido muchas limitaciones físicas pero he confiado totalmente en mi entrenador y en su criterio. Ha habido momentos en los que pensaba que no volvería a mi nivel y hemos trabajado mucho, muchas horas de médico, fisio… Al final el genio detrás de esto es mi entrenador, que ha sabido adaptarse a todo, que no es nada fácil. Yo al final solo tenía que seguir su plan», asegura.

La atleta del Playas de Castellón empezará ahora a preparar la temporada al aire libre, donde esperar tener continuidad para mejorar sus registros en el 800 y en el 1.500 y volver a pelear por el pódium.