La derrota sufrida el pasado domingo por el Salamanca UDS no fue una más, ya que la goleada que le infligió el Celta B le llevó a colocarse colista por primera vez en su historia. Una posición que siempre desagrada, pero todavía más cuando la competición ha cumplido ya el primer tercio.

La historia del club blanquinegro, en un primer momento denominado CF Salmantino, comenzó la década pasada directamente en Tercera División. En su primera temporada tuvo que esperar varias jornadas a debutar en la competición, pero arrancó con una victoria frente a la Gimnástica Segoviana, lo que le permitió despegarse desde el principio del último puesto. Al curso siguiente también venció en su primer encuentro, y aunque en ocasiones estuvo peleando por no bajar, lo hizo siempre con ventaja sobre el colista.

Después de esas dos temporadas se produjo el descenso administrativo, ya que la FCyLF envió al equipo a la categoría más baja del fútbol español. En Provincial y Regional jamás tuvo problemas para ocupar los puestos de cabeza, al igual que en su regreso a Tercera División, donde comenzó como un tiro a las órdenes de María Hernández. De hecho, el entrenador fue destituido cuando marchaba líder.

El Salamanca UDS ni siquiera llegó a ser colista hace dos campañas, cuando debutó en Segunda B con una goleada en contra en casa del Fuenlabrada (5-1). El conjunto charro estuvo penúltimo en las dos primeras jornadas, puesto al que regresó tras el décimo encuentro. Pero pese a sufrir hasta el último instante por lograr la permanencia, siempre hubo equipos peores.

La campaña pasada los blanquinegros tuvieron un buen comienzo e incluso llegaron a liderar la tabla. Con el avance de la liga perdieron posiciones, aunque cuando el COVID-19 obligó a detener la competición seguían fuera del descenso, como habían estado durante todo el curso.

Sin embargo, todo ha cambiado esta temporada, en la que el pésimo arranque del Salamanca UDS le ha instalado en la última posición del grupo. No en vano, el equipo tan solo ha sido capaz de sumar 3 puntos de 18 posibles. En el otro subgrupo el Covadonga, que cierra la tabla, lleva el mismo número de puntos, pero con un partido menos y mejor diferencia de goles, un hecho al que también ayuda que el cuadro charro esté entre los que más encajan de toda la Segunda B.