El Confiterías Gil Ciudad de Salamanca venció el pasado sábado al Hand Vall Valladolid en el partido de ida de la semifinal de Primera Nacional. El conjunto charro superó al pucelano por cuatro goles y afrontará con una buena renta el encuentro de vuelta de este domingo en el polideportivo Gonzalo de Berceo.

Pese a la ventaja en el marcador global, Ángela Madruga, su capitana, es consciente de la complejidad que entraña el choque, pero confía en sus posibilidades: «Se presenta complicado, pero el equipo está convencido, con muchas ganas, está trabajando un montón y llegamos en el mejor momento posible«.

El 27 a 23 de la ida fue un buen resultado para afrontar con garantías la vuelta, pero pudo ser mejor. «Creo que salimos un poco imprecisas, con nervios, al final son partidos que gustan jugar, pero después de todo este tiempo es la primera vez que teníamos el pabellón lleno y los nervios estaban ahí. El equipo estuvo concentrado y se notó. Hubo momento en los que se podía haber roto el partido, no fue así, pero se sacó un buen resultado», asegura.

En la primera vuelta, el Confiterías Gil Ciudad de Salamanca cayó en la pista vallisoletana por 21 a 20, pero Madruga no firma ese marcador: «Vamos a ganar. Lo hemos hablado, es como si el resultado hubiera sido un empate, no queremos sustos». La experiencia del partido de liga les dice que no pueden bajar la guardia. «Es un rival bastante duro. En la fase regular perdimos de uno, aunque es verdad que fuimos ganando hasta el final, lo que nos demuestra que no podemos confiarnos en ningún momento. Es un equipo estructurado y compacto», señala.

El conjunto charro está a un encuentro de colarse en la final por el título de liga frente al BM Fuentes Carrionas, lo que habla muy bien de la temporada de las de Julián Martín. «Estoy bastante contenta, creo que con toda la situación al principio el equipo estaba más disperso, era difícil tratar de cuadrar el juego, tenemos bastantes juveniles que también tenían su liga y adaptar el juego a esas circunstancias es difícil, pero lo hemos conseguido», afirma la capitana.

Además, valora de forma muy positiva la aportación al primer equipo de las chicas juveniles: «Están muy bien, es verdad que el año pasado algunas dieron el paso y de vez en cuando jugaban con nosotras, pero este año es un paso más grande. Las que están jugando el próximo año son senior y cuanto antes se adapten, ganamos todas».

Mirar hacia atrás y hacia las categorías inferiores enorgullece a la líder del Confiterías Gil Ciudad de Salamanca: «Ver una cantera así, que viene pisando fuerte, y la ilusión de las juveniles por jugar con nosotras es bonito. Yo he vivido otra época, donde éramos diez y dando gracias, y es algo muy bonito de ver. Ha cambiado mucho».